JACULATORIAS A SAN JOSÉ

Origen de las jaculatorias a san José
Se estima que las jaculatorias a José datan desde inicios del primer milenio, pues desde mucho tiempo atrás José (aún sin ser decretado un Santo católico) era reconocido como la figura más cercana a al primogénito de Dios como a su santa madre María.

Hoy en día los datos antiguos nos permiten conocer más sobre su historia, así como el origen de sus jaculatorias que son las aceptadas por la cristiandad y las cuales se comenzaron a establecer de manera concreta en el año 1847 cuando el Papa Pío IX nombró a San José,”Patrono de la Iglesia Universal”.

Cuándo Rezar las Jaculatorias a San José
Las jaculatorias a San José realmente podemos hacerlas cualquier día y en cualquier momento paro nuestra iglesia nos anima a rezarlas esencialmente al terminar la oración a San José de modo que nuestras súplicas tengan un mayor alcance, así como nuestra alabanza a su santo nombre y su santa figura.

También es necesario rezar las jaculatorias a José, padre adoptivo de Jesús, durante el rezo del Rosario dedicado a él (Rosario de San José) más específicamente después del rezo de cada misterio que constituye la vida de José como esposo y padre fiel a su familia y a la voluntad de Dios.


San José: acude a nosotros en los momentos difíciles.

Concédenos, sagrado San José que siempre bajo tu protección, podamos pasar nuestras vidas sin pecado.

San José nuestro Padre y Señor, bendice a todos tus hijos de la Santa Iglesia de Dios.

San José, padre adoptivo de Señor Jesús y verdadero esposo de María siempre Virgen, ruega por nosotros.

Glorioso San José, alcánzame de Jesús y María, gran fe y plena confianza en la Divina Providencia.

San José, modelo y patrono de aquellos que aman al Sagrado Corazón de Jesús, ruega por nosotros.

San José, modelo de amor al Señor; bendice a tu pueblo y llévalo a Dios.

San José, esposo y padre elegido por Dios para conducir la Sagrada Familia de Nazareth, protege nuestras familias.

San José, Padre adoptivo de Jesucristo y verdadero Esposo de la Virgen María, ruega por nosotros y por los agonizantes de este día (noche).